En el corazón del Bosque Arcoíris vivía una alegre niña llamada Ruby Snow . Con sus rizos morados atados con brillantes cintas rojas y un vestido lleno de alegres colores, traía calidez a dondequiera que iba. En su mano siempre llevaba una brillante manzana roja.
Pero no era una manzana común y corriente.
Era la Manzana de los Deseos , una fruta mágica que sólo hablaba a aquellos con un corazón verdaderamente bondadoso.
Una mañana, los animales del bosque se preocuparon. El antiguo Árbol de los Deseos había dejado de brillar. Sin su luz, toda la magia del bosque se desvanecería lentamente. Ruby Snow sabía que tenía que ayudar.
Sosteniendo la Manzana de los Deseos, siguió su suave resplandor a través de campos, arroyos y prados floridos hasta que encontró a un tímido ciervo joven escondido en las sombras. El ciervo había roto accidentalmente una rama del árbol y estaba demasiado asustado para admitirlo.
Ruby se arrodilló a su lado y dijo suavemente:
Todos cometemos errores. Lo importante es elegir la amabilidad después.
Ante sus palabras, la manzana brilló con fuerza, enviando una cálida luz al Árbol de los Deseos y sanando su rama. La magia regresó al bosque, brillando con más fuerza que antes.
Y desde ese día, todo el mundo lo supo…
La bondad de Ruby Snow era la magia más preciada del bosque.